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Reflexionamos con el docente universitario José Astudillo sobre el aumento de la violencia en Ecuador y sus consecuencias para el país. 

“¿Era Ecuador una isla de paz? De la noche a la mañana se mata a candidatos presidenciales, alcaldes, eso impacta a nivel internacional”, comentó en sus primeras declaraciones. 
Reconoce que el país era un paso de droga y que nunca fue una isla de la paz, pues siempre estuvo rodeado de sicariatos, violencia entre bandas. 

Además, coloca en el centro del problema a las cárceles del país, alerta que son controladas por los grupos delincuenciales. “Los jefes de las bandas se sienten cómodos dentro de las cárceles y realizan sus operaciones desde estos lugares”, señala. 

Comentó también sobre la tabla de drogas, advierte que eliminarla no acaba con la inseguridad, más bien sostiene que aumentará la corrupción para la venta de droga. 

Espera que la depuración de las Fuerzas Armadas y la cúpula policial aporten a combatir el crimen organizado. Añade, no obstante que el narco y el crimen organizado no solo están en la policía y por eso se debe depurar todas las instituciones responsables de la seguridad en el país.  

Considera que el tiempo que el presidente estará en funciones es muy corto para hacer cambios profundos, pero señala que sí podría sentar las bases para transformaciones que encaminen a una reactivación económica.