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Pablo Arias, director de la carrera de Ingeniería Eléctrica de la Universidad Católica de Cuenca, alertó que, tras las decisiones del presidente Daniel Noboa de suspender los apagones por el feriado de Independencia de Cuenca, puede evidenciarse un impacto en los niveles de las represas para la generación de energía.

Sostiene que no se han ejecutado los planes maestros desde el año 2016 y ese es uno de los factores de la actual crisis.

 
Lamenta además que no haya control por parte de intendencias y gobernaciones y la gente especule con los precios de generadores, focos, etc. “Se aprovechan del propio pueblo”, lamenta. 

Para Arias el estiaje va a continuar y no se puede prever una fecha en la que concluya. Desmiente la versión del Gobierno de que la crisis puede terminar en diciembre, pues se necesitan datos e información. “Después del feriado de noviembre el país puede regresar a cortes de 14 horas, de continuar la sequía”, señala.

 
Advierte que Colombia también está crisis, pero su modelo y manejo económico es diferente; no obstante, es difícil que el vecino país nos venda energía.  

Asevera que ha habido una mala planificación de los últimos ocho años, y que ahora al ciudadano le toca ahorrar el uso de energía.